"Abstinencia y promiscuidad, las dos caras de la moneda a un mismo suceso"



                                   

       
Realmente pienso que, según se van aconteciendo episodios en mi vida,  el ir recopilando mis propias experiencias, cambien las de los demás, las buenas y  las malas, sirve muchísimo para aprender, sobre ti mismo y sobre el resto.

Me he dado cuenta que en este tema de los abusos sexuales en la infancia, se guardan muchos puntos en común pero a su vez otros muy distantes, por lo que, su terapia, su sanación, su aprendizaje para convivir con las secuelas, varía de unas personas a otras. En muchos casos, la opción de la abstinencia sexual, del pánico o angustia hasta para ir al ginecólogo es algo muy común. Pero también esta el lado contrario, la promiscuidad y la adicción al sexo como si fuera una necesidad imperiosa de la que no puedes prescindir y de la que depende tu autoestima y tu canalización de la ansiedad, del dolor. Obviamente, todas las adicciones, todos los comportamientos compulsivos responden a impulsos dolorosos que queremos apaciguar, dominar, controlar. Pero erramos en la manera.
 
Atendiendo al hecho de la existencia de ambas posibilidades en la vida de una víctima, las terapias de ayuda por profesionales deberían estar enfocadas de diferente manera para poder tratar cada caso. Por propia experiencia he comprobado, que los consejos, pautas, "soluciones" dadas a personas que como yo han sufrido abusos sexuales en su infancia, no dan el mismo resultado en estos dos grupos. No puedes aplicar las mismas bases aunque el daño o la causa de origen sea la misma. Hay unas experiencias propias de cada una de estas víctimas de abusos, el que ha optado por la abstinencia o fobia al sexo ha vivido o vive en  una serie de experiencias posteriores al abuso que probablemente no serán las mismas, ni por asomo, a las que haya podido vivir otra persona que opte por el la promiscuidad o por el sexo como válvula de escape. Tanto en un caso como en el otro estas vivencias pueden conllevar, de hecho en muchos casos conllevan, otros tipos de secuelas derivadas de las propias consecuencias de un comportamiento u otro.
 
Este punto en cuestión creo que tiene la suficiente importancia como para tenerlo en cuenta a la hora de tratar a víctimas de abusos sexuales en la infancia y sería interesante tenerlo en cuenta de una vez. Dejen de perder ya el tiempo con soluciones estándar. No funcionan.


"CADA ABUSO QUE EVITAMOS, SON MUCHAS VIDAS QUE SALVAMOS"

 Helga F Moreno